sábado, 24 de marzo de 2007

El día en que nosotros volvamos a la Universidad Laboral (a Javier Narbaiza)

Desconocido pero querido Javier:
El día 23 de diciembre de 1999, paseando por Avilés, pude ver en el escaparate de la "llibrería" La Xaronca un libro de tu autoría y que titulas "El día en que volvimos a la Universidad Laboral". Ni que decir tiene que lo adquirí casi de forma compulsiva (recuerdo que el precio fueron 2.800 pesetas). Posiblemente sea el libro de mi biblioteca que más veces he leído. Cuántos recuerdos albergas en ese libro, amigo Javier, de ese día en que tú y los de tu época y otras épocas de "laborales" volvisteis a encontraros en la Laboral de Gijón. Era el año 1998, y se estaba celebrando el cincuenta aniversario del inicio de las obras de lo que en aquel momento pretendía ser un orfelinato. Tengo que lamentar no haberlo sabido: seguro que me hubiese dado una vuelta por la Uni.
Amigo Javier, cuánta sana envidia me das cuando leo y releo una y otra vez más tu libro, sobre todo ahora. Este año, un grupo de la promoción salida en el 77 (fíjate, 12 años después de que tú lo hicieses) ha decidido reencontrarse para poder recordar juntos aquellos años de tan gran importancia. Pero, amigo Javier, tendremos menos suerte que tú, y por eso esta sana envidia que te tengo. Vosotros pudisteis dormir en los mismos dormitorios en los que unos treinta años atrás lo habíais hecho, aunque con otras colchas que no fueron las amarillas; nosotros, ni siquiera podremos hacerlo en las de cuadros verdes y negros. Eso sí, seguro que las cagadas de paloma las vamos a encontrar por todo el recinto, sobre todo por las zonas abandonadas que todavía no han entrado en obras. Al igual que os pasó a vosotros, alguno de los "míos" tampoco aparecerá con mucho pelo; no tendremos proyección en el teatro... todo será distinto a tu regreso a la Laboral, pero tendremos en común los RECUERDOS, nuestras VIVENCIAS, la ILUSIÓN del reencuentro, que ni el Centro de Arte, ni el hotel de 5 estrellas, ni la Ciudad de la Cultura que albergará poco a poco "nuestra vieja Laboral" serán capaces de sepultar. Estos últimos días parece que cunde cierto desánimo en mis "viejos" y queridos "pemeceros" (así es como hemos decidido llamarnos; algún día, si tengo la ocasión, te contaré por qué). Hoy Paco nos ha dicho que igual no podría venir; ya puedes imaginar qué mal lo estará pasando nuestro querido Paco, uno de los principales promotores del reencuentro, aunque estoy convencido de que vendrá, seguro que vendrá, por encima de todo, ya lo verás. Otros "pemeceros" todavía no saben si podrán acudir; imagino que las ocupaciones de todo tipo serán las causantes de no poder decidir todavía la asistencia. Pero, amigo Javier, estoy convencido de que al final todos harán el esfuerzo que esto se merece y acudirán.
En fin, amigo Javier, "el día en que nosotros volvamos a la Universidad Laboral" todo será distinto por fuera aunque, por dentro, todo será igual que el día en que tú volviste con los tuyos.
Adonde quiera que estés, un emocionado abrazo, Javier que no conozco.
Pepe el de Trasona.

2 comentarios:

pemece dijo...

Amigo Pepe, tu escrito a Narbaiza me acaba de hacer polvo. Leo y releo y mientras mas leo mas se me llenan los ojos de lágrimas, no puedo evitarlo, soy incapaz de ver las letras que escribo.
Ha sido una decision dura, acudir o no, o acudir a medias. Podía poner cualquier otra excusa pero es que yo no puedo mentir.
A mi casa puede venir cualquiera y si puedo puedo y si no también, los amigos son los amigos.
Sabéis que desde tiempos he intentado localizar al mayor número posible de colegas, pero tengo que decir que no me gusta ir de prestado por la vida. Las cosas son como son y a veces no queda más que joderse.
Un saludo para todos. SALUD
paco
(Fecha original: 26 Marzo 2007 a las 19:08)

pemece dijo...

El dia en que volvamos a nuestra UNI, si es cierto volveremos algunos sin pelo o poco pelo, pero se llevaran las alforjas, que un dia cuando llegamos hace años a CHESTE estaban vacias, se llevaran llenas de ilusion por ver al amigo, a aquel con el que compartiamos penas y alegrias, momentos de militancia politica y desasosiegos por alguna que otra chica. Todo esto, amigo Pepe, cabrá en esas alforjas, pero sobre todo y ante todo llevaremos el corazón en un puño. Son muchos los años que han pasado y cada uno tenemos una forma de pensar y entender la vida que quiza no se asemeje a aquella que entonces pudimos vivir, pero seguro que un poso queda: TODO PASA Y TODO QUEDA PERO LO NUESTRO ES PASAR, PASAR HACIENDO CAMINO... CAMINO A LA LABORAL.
SALUD
paco
(Fecha original: 28 Marzo 2007 a las 18:42)